Hablamos de herramientas para mejorar la atención y disminuir el ruido mental!
Y es que hoy en día vivimos inmersos en pensamientos mecánicos, en un estado de distracción casi continua, dejándonos llevar por la cantidad de inputs sensoriales que nos rodean todos los días. Actuamos como si fuéramos robots: suena el aviso de WhatsApp y antes de que nos damos cuenta el dedo ya está deslizando la pantalla táctil…
La práctica de yoga es un momento perfecto para movernos de manera más consciente, escuchar las sensaciones que se producen en el cuerpo, conectar con nuestra respiración y de esta manera calmar la mente.
Sin embargo, no resulta nada fácil acallar a la mente.
La primera premisa que es bueno entender es que el ruido de tu mente parlanchina es constante y no pasa nada. Solamente hay que saber lidiar con ello.
Cómo mejorar la atención en tu práctica de yoga:
A continuación algunas CUATRO herramientas para mejorar la atención y disminuir el ruido mental en tu práctica de Yoga.
1. Para mejorar la atención: Sé imparcial
Observa el diálogo incesante dentro de tu cabeza de manera imparcial.
Toma el rol de observador. Solamente estás admirando o siendo testigo de lo que ocurre. Es como si estuvieras viendo una película pero sin sentirte identificado para nada con lo que sucede. Está pasando, sí, pero tú no eres ese pensamiento o sensación.
2. No te involucres
No te involucres, ni te identifiques con tus pensamientos, emociones o sensaciones. Es muy fácil dejarse llevar por las emociones o subirse a lomos de algún pensamiento. Recuerda que eres un espectador, y estás ahí observando.
Otra forma de verlo, es la diferencia entre simpatía y empatía. Si sientes simpatía por alguien que está pasando una mala racha, descubres y entiendes el sufrimiento de esa persona. En cambio, si lo que sientes es empatía, estás sintiendo el dolor o sufrimiento de la otra persona.
Entenderlo (simpatía) está bien, porque observas desde la imparcialidad. Al sentirlo (empatía), sin embargo, te involucras con la sensación y eso propicia más ruido mental.
3. Usa anclajes
Un anclaje es como un salvavidas para no ahogarte en el mar de pensamientos y sensaciones. Es un punto de referencia para no perderte entre las montañas de tus emociones.
Te animo a que crees un anclaje que te ayude a volver al momento presente cada vez que notes que la mente empieza a divagar.
Puedes usar tu respiración cuando notes que tu flujo de pensamientos se acumula (esa reunión que tienes después de la práctica, o esa discusión con tu pareja de ayer). También puedes usar las sensaciones como el contacto de tu cuerpo; la planta de tus pies, piernas o manos con el suelo.
Cada vez que la mente divague, usa el anclaje para volver.
No pasa nada si durante nuestra práctica la mente se nos va de paseo. Lo importante es traerla de nuevo para acallar la mente y mejorar la atención. Con la práctica, como con todo, conseguiremos estar más presentes durante más tiempo.
4. Dentro y fuera del mat
Sé constante y practica fuera de esterilla. Es relativamente fácil y puedes hacerlo en cualquier momento del día.
Cuando camines, camina, cuando comas, come. Es decir entrégate por completo a cada actividad que realices en tu día a día y disfruta de cada instante.
De nuevo aquí puedes usar tus anclajes para devolverte al momento presente.
Puedes usar estas cuatro herramientas mientras meditas o realizas tu practica de yoga. Recomiendo que lo hagas en algún lugar interior, puesto que fuera es más fácil distraerse con el viento, ruido y sensaciones.
Si quieres saber más sobre este tema, hay un libro que se llama La Biografía del Silencio de Pablo d’Ors, que habla de su descubrimiento a través de la meditación que aborda de forma autobiográfica estos aspectos. Si quieres conocer los 5 libros sobre Yoga (o no) que más me han inspirado solo tienes que pinchar aquí.
Espero que estas herramientas te ayuden a tener más presencia y a mejorar la atención!